No es que no me pasen cosas, es que me prometí no escribir sobre temas que no me divirtieran y últimamente las cosas que me pasan no me hacen ni puta gracia. He tenido que remangarme otra vez para poner orden a las circunstancias de mi vida, y lo de pegar puñetazos encima de la mesa, aunque justificado y necesario, me pone de muy mala ostia (es ostia u hostia?)
Y en estas andaba yo, con mis micro dramas, cuando por azar cae en mi mano el número de enero del
Muy Interesante (que con
Hola, es la única literatura que me da la gana de leer, después del empacho de boletines oficiales que me estoy pegando) donde bajo los títulos de:
Psicología prospectiva (en mayúsculas)
Lecciones de vida (mayúsculas y amarillo)
Las 8 verdades esenciales que todos aprendemos demasiado tarde (coño!) y ya en el interior:
Ocho claves para una vida feliz (tate!) relata algo muy obvio, que te sabes de memoría,
pero si eso ya mañana, o cuando los niños sean mayores, o cuando me jubile, o cuando.... jamás.
Dicen que una enfermera austrialiana llamada Bronnie Ware que trabaja con enfermos terminales, tuvo la sensibilidad de recojer los testimonios de aquellos pacientes que relataban de lo que más se arrepentían en su lecho de muerte.
No te voy a decir nada que no sepas, aunque te pases la vida procastinando.
(No, lo de procastinar, no hacer referencia a nada sexual, aunque si estás casado o tienes pareja hace tiempo seguro que lo haces, al menos con la legítima/o)
1. Cómo estar solo (y disfrutarlo) Yo pensaba que era un placer reservado a los que somos padres que de repente descubrimos el placer de poder mear sin tener compañía, ni que te aporreen la puerta. El placer del silencio, o de la ausencia de
"imbéciiiil no me toqueeeeees, mamaaaaaaaaaaaaaa, a que te escupo?........." Pues no, va a ser que la necesidad es común a todos los humanos, por un tema neurológico de necesidad funcionamiento óptimo del cerebro mediante la falta de estimulos. fíjate!
2. Cultiva la amistad y presérvala. Yo añadiría y ampliala. Crecerás, te enriquecerás, sentirás, vivirás....
3. La intención no es suficiente. Hemos perdido mucho, pero mucho tiempo en arreglar una relación que no funciona, a ayudar un amigo que no va a dejar de estamparse una y otra vez.... Es complicado saber cuando parar...
4. Aprender a perder el tiempo. Te confieso ya que tenemos confianza, que yo necesite ayuda profesional, para poder practicar deporte, tirarme en el sofá, pasarme una tarde pintándome las uñas y poniendome los rulos....sin sentirme culpable. Es más, como comenta el artículo y doy fé, en ocasiones, parar, relajarse, dar un paseo, hace que el trabajo salga antes y mejor... De todo esto te hablo otro día que tengo para escribir 20 tomos
5. Busca la afinidad en las relaciones. Jode, cuesta, pero es lo que hay
6. La importancia de saber dosificar. Copio: Dosificar el autocontrol, la confianza en los demás, el optimismo o las tendencias adictivas es esencial.
7. Hábitos sanos y vida ordenada. Piensa lo que quieras, pero tengo pruebas de que lo primero que hay que hacer para que todo vaya bien es poner orden, limpieza, cumplir unos horarios.... el cuerpo, la mente lo necesita, te digo yo a tí que sí, no me lo discutas
8. Acepta a los demás tal y como son. Y yo añadiría, y a tí mismo sobre todas las cosas.
Pienso que todos estos principios se pueden resumir en uno: y es la consciencia de que esto a lo que llamamos vivir es un segundo que en nada se acaba y sin previo aviso, y que aunque esto nunca me lleve a liarme la manta a la cabeza porque tengo responsabilidades, dentro de mis limitaciones, he recuperado la avidez por vivir, así que le he dicho que sí a a una compañera que me ha invitado a acompañarla a un viaje.
Y he recuperado de nuevo la ilusión, además de que he dejado de fumar y me veo más alta, más guapa, más rubia y eso también ayuda....